Da: "Nello Margiotta" A: Oggetto: PERU:Continúan disturbios en Arequipa Data: martedì 18 giugno 2002 9.35 Abraham Lama LIMA, 17 jun (IPS) - Las protestas contra la privatización de dos empresas de electricidad continuaron este lunes en Arequipa, la segunda ciudad de Perú, pese al estado de emergencia y la intervención militar dispuestas el domingo por el gobierno de Alejandro Toledo. El estudiante Edgard Pinto murió este lunes a consecuencia de las lesiones que sufrió durante los disturbios del fin de semana en la meridional ciudad de Arequipa, en los que unas 100 personas resultaron heridas. El gobierno suspendió el derecho de reunión e impuso un toque de queda entre las 22.00 y las 5.00, hora local. Unos 700 soldados y 1.000 policías patrullan las calles de esta ciudad de 750.000 habitantes. Durante la jornada de este lunes las calles permanecieron desiertas en algunas zonas por la huelga general convocada por el Frente Amplio de Defensa de Arequipa, aunque continuaron las marchas de protesta, así como barricadas y quema de neumáticos en muchas esquinas. "Las amas de casa se han sumado a las demostraciones masivas haciendo sonar sus ollas (cacerolas) desde sus casas. Desde esta mañana el ruido de los cacerolazos recorre como olas la ciudad de un extremo a otro", dijo la periodista arequipeña Ursula Rondón. El alcalde de Arequipa, Juan Manuel Guillén --quien preside el Frente Amplio de Defensa-- y 23 alcaldes de localidades de varios departamentos de la región meridional cumplieron este lunes el quinto día de huelga de hambre contra los planes privatizadores del gobierno de Toledo. El interventor militar, general Oscar Gómez, aseguró que no hubo arrestos ni detenciones y que sus efectivos sólo actúan en defensa de los edificios públicos y locales comerciales. "Tampoco haremos nada contra los medios de prensa, que podrán seguir emitiendo sus opiniones sin ninguna censura ni presión de nuestra parte", dijo Gómez. "Los militares están escaldados por las acusaciones de haber violado los derechos humanos durante el gobierno del ex presidente (Alberto) Fujimori (1990-2000) y no creo que estén dispuestos a arriesgarse a ser acusados más tarde. Solo harán lo que las autoridades civiles les pidan por escrito", comentó el abogado arequipeño Eduardo Zapater. "El canal 4 de televisión y radio Melodía siguen informando de las protestas callejeras y difundiendo los comunicados del frente de defensa, pese a haber sido señalados por el ministro del Interior, Fernando Rospigliossi, como propagandistas de la violencia", dijo Rondón. Los disturbios se desataron el viernes, un día después que las empresas públicas de electricidad de Arequipa, Egasa y Egesur, fueron adquiridas por la corporación belga Tractebel, por 167 millones de dólares, en una subasta pública en la que no hubo otros oferentes. La venta se llevó a cabo pese a un pronunciamiento contrario de la justicia. La mayoría de la población y el gobierno de la ciudad se opusieron a la privatización desde que esa posibilidad fue anunciada por el gobierno de Fujimori. El ahora ministro de Justicia, Fernando Olivera, denunció el año pasado que la justicia de Bélgica investigaba a Tractebel, acusada de pagar sobornos para obtener contratos. Las protestas relativamente pacíficas del viernes fueron duramente reprimidas por la policía, que utilizó las granadas de gases lacrimógenos como proyectiles contra los manifestantes, causando heridas a casi un centenar de personas. La represión y las declaraciones de Rospigliossi, quien aseveró que un minúsculo grupo se opone a las privatizaciones, agravaron la tensión y la violencia de las protestas, que el sábado incluyeron la toma del aeropuerto local y el incendio de varios edificios públicos. Los dirigentes del Frente Amplio de Defensa rechazaron la promesa del presidente Toledo --anunciada el domingo por televisión-- de invertir 85 millones de dólares, casi la mitad del dinero de la privatización, en "obras sociales" para la ciudad. El alcalde Guillén dijo que no dialogará con representantes del gobierno central mientras se mantengan el estado de emergencia y la suspensión de los derechos constitucionales en su ciudad. "Proponemos un referéndum para que el gobierno de Lima compruebe que más de 90 por ciento de la población de Arequipa no acepta la privatización de Egasa y Egesur. Mientras tanto, que se suspenda la venta. No hay otro camino de conciliación", sostuvo Guillén. El ex presidente Alan García (1985-1990), líder del opositor Partido Aprista Peruano, sugirió crear una comisión mediadora integrada por legisladores de los partidos de oposición, para poner fin al enfrentamiento. "El problema no es sólo de rechazo a la privatización de una empresa de servicio público, tema siempre sensible, sino también de la deshonestidad política que significa que un presidente transgreda la promesa que formuló en su campaña electoral", dijo el líder aprista. García recordó que Toledo suscribió en marzo del año pasado un documento ante el alcalde Guillén en el que se comprometía a no privatizar las empresas ahora vendidas. Ese documento fue distribuido por el legislador opositor Arturo Valderrama durante la subasta ganada por Tractebel. "Es extraña esta insistencia y apuro en un contrato vulnerable, no solo porque no cumple con el requisito legal de tener tres postores (oferentes) como mínimo, porque los otros declinaron, sino porque hay pendiente un pronunciamiento judicial al respecto", dijo García Nello change the world before the world changes you because another world is possible www.peacelink.it/tematiche/latina/latina.htm