Uno de los asesinos, cubano anticastrista, del ex Canciller chileno Orlando Letelier recupera la libertad, se arrepiente pero no pide perdón. Washington. 2/08/2001. Uno de los crímenes más odiosos de la dictadura de Pinochet fue el asesinato del ex canciller chileno, Orlando Letelier, el 21 de septiembre de 1976. Letelier murió cuando estalló una bomba colocada debajo de su automóvil, que también mató a su secretaria estadounidense, Ronni Moffitt. Ahora, el exiliado cubano Virgilio Paz Romero dijo que su participación en el atentado contra el ex canciller chileno fue "un grave error humano". "Tenía 24 años, era un hombre joven, lleno de ideas", dijo Paz Romero en conferencia de prensa tras ser liberado por el Servicio de Inmigración y Naturalización (INS) de Estados Unidos. Arrepentido pero no pide perdón. Pese a su remordimiento, Paz Romero de 49 años de edad, señaló que no debe unas disculpas a la familia de Letelier. A la viuda le diría "que su marido era un soldado de su causa". La investigación desarrollada en Estados Unidos llegó a la conclusión que el atentado fue organizado por los servicios de inteligencia del gobierno militar chileno con la ayuda del exilio cubano. Letelier, ex ministro de Defensa, embajador de Chile en Washington y canciller del gobierno del socialista Salvador Allende, se había convertido en uno de los principales críticos contra el golpe de Estado perpetrado por el general chileno Augusto Pinochet en septiembre de 1973. En Chile, el abogado de la familia Letelier no vio con buenos ojos la liberación de Paz Romero. "Nosotros creemos que es lamentable que haya sido puesto en libertad porque evidentemente fue una de las personas que llevó a cabo el asesinato de Letelier en Washington, y es evidente que su puesta en libertad debilita los derechos humanos internacionalmente", dijo a la BBC el abogado Juan Bustos Ramírez. Paz Romero se declaró culpable de conspiración para asesinar en 1991 y fue sentenciado a 12 años de cárcel. Tras cumplir la mitad de su condena quedó bajo la custodia del INS ya que EE.UU. y Cuba no tienen un tratado de deportación. El liberado se benefició de un reciente fallo de la Corte Suprema de EE.UU. que declaró inconstitucional la detención indefinida de ex convictos extranjeros. Letelier, socialista moderado, con buenas relaciones con los EE.UU., donde vivió y trabajó muchos años, fue eliminado por la policía de Pinochet porque se lo consideraba un ³posible opositor al dictador², es decir, una figura prestigiosa que tenía la capacidad para reunir un amplio arco de partidos de oposición. Por la misma razón esta policía asesinó en Buenos Aires al ex jefe de las Fuerzas Armadas chilenas, Carlos Prats (y a su esposa) que estaban en el exilio. Asimismo, idénticas motivaciones inspiraron la acción de terroristas de la derecha italiana, que pagados por la policía de Pinochet, trataron de asesinar al ex vicepresidente chileno Bernardo Leighton y a su esposa, que no murieron pero quedaron gravemente heridos y paralizados. La furia de Washington porque Chile pide interrogar a Kissinger. El gobierno de reaccionó airadamente a las peticiones judiciales de Chile y Argentina para interrogar al ex-secretario de Estado, Henry Kissinger, por casos relacionados con la violación de los derechos humanos. Según el diario "The Washington Times", la administración estadounidense calificó las solicitudes de "injustas y ridículas". El rotativo conservador británico "The Daily Telegraph" asegura también que Washington está "furioso" y Bush habría condenado la decisión de la Corte Suprema de Chile de enviar un cuestionario a Kissinger, señalando que la medida acentúa las dudas respecto de la propuesta de un Tribunal Penal Internacional. "El peligro del TPI es que cualquier ciudadano estadounidense pueda ser arrestado en el extranjero y procesado por motivaciones políticas", aseguró un funcionario próximo a Bush, al "The Daily Telegraph". Fuente : BBC - REINO UNIDO - AP - ANSA