Da: "Nello Margiotta" A: Oggetto: Venezuela:CTV convoca a nuevo paro nacional Data: domenica 16 giugno 2002 11.16 http://www.el-nacional.com El secretario general de la Confederación de Trabajadores de Venezuela, Manuel Cova, aprovechó su discurso en la concentración que se realiza hoy en la avenida Bolívar en memoria de las víctimas del 11 de abril, para convocar a una nueva paralización general de actividades. Por su parte, miles de caraqueños pidieron hoy la renuncia al presidente Hugo Chávez durante la llamada "marcha contra la impunidad" que se realizó para recordar a las víctimas del tiroteo que acabó con la vida de entre 18 y 24 personas el pasado 11 de abril. Los manifestantes salieron de la Plaza Brión y se desplazaron con normalidad hacia la avenida Bolívar, sin que se presentara ningún contratiempo. Carlos Fernández, presidente de Fedecámaras, manifestó a los periodistas que "casi 70 días después de lo ocurrido en abril seguimos sin saber qué pasó, por eso estamos aquí, para lograr pacíficamente y con diálogo un país de ilusión". "Hoy la sociedad está más fracturada que el 11 de abril y hay que buscar soluciones", añadió Fernández, que sustituyó a mediados de abril al empresario Pedro Carmona al frente de la patronal. Entre los manifestantes, convocados por una docena de partidos y 30 organizaciones civiles y bajo el lema de "Prohibido olvidar", predominó el color negro. Esta vez, las autoridades desplegaron un dispositivo de más de 6.000 policías para evitar que se reproduzcan tragedias como la de hace dos meses. La azoteas se han convertido en lugares de especial vigilancia, toda vez que el 11 de abril sirvieron para la actuación impune de desconocidos francotiradores que dispararon indiscriminadamente contra manifestantes de oposición y partidarios de Chávez. Allí, sectores de la sociedad civil y agrupaciones políticas presentaron un documento a la colectividad en el que señalan responsabilidades por los hechos sangrientos ocurridos el 11 de abril y en el que se declararon en desobediencia civil hasta que los funcionarios del gobierno "salgan del poder en forma pacífica". La aprobación del documento "Prohibido Olvidar" sirvió de colofón al acto en el que la oposición llamó a concentrarse el 11 de julio ante el Palacio Presidencial de Miraflores, sede del Gobierno, para pedir de nuevo la salida de Chávez. "Vamos a convocar al país a una segunda gran Asamblea de Ciudadanos el 11 de julio frente al Palacio de Miraflores y allí, si es que aún (Chávez) se encuentra en el poder vamos a pedirle la renuncia. Este pueblo va a sacarlo del poder con los votos", señaló el documento. El texto invocó el artículo 350 de la Constitución venezolana, que señala que el pueblo "desconocerá" a cualquier régimen que "contraríe" la democracia, para justificar la "desobediencia civil" ante el Gobierno. "Los ciudadanos nos declaramos en desobediencia civil frente a este Gobierno y daremos inicio a una sucesión de manifestaciones masivas para que los líderes salgan del poder y se sometan a juicio", señaló el documento. También aludió al artículo 20 de la Carta Democrática de la Organización de Estados Americanos (OEA), para señalar que el Gobierno venezolano "viola" esa legislación, pues "se ha pretendido imponer desde el poder un proyecto (político) autoritario". Los dirigentes políticos que arengaron la marcha coincidieron en que el gobierno de Chávez "promueve la violencia y la división" de los venezolanos y también señalaron que podrían planear acciones de "desobediencia fiscal" ante el nuevo plan económico del Ejecutivo. Carlos Fernández pidió justicia para los muertos de abril y rechazó que el Gobierno cobre a los venezolanos más impuestos. "Nos piden que nos metamos la mano en el bolsillo para que financiemos la corrupción, no es posible que se exija más sacrificio", señaló. Subrayó que los empresarios están "unidos" a la sociedad civil para "encontrar caminos que nos conduzcan a un nuevo país" y rechazó la intención del gobierno de Chávez de querer "imponer un sistema comunista, al que no estamos dispuestos a ir". La marcha, convocada por asociaciones civiles y partidos políticos de oposición, también exigió la renuncia del fiscal general, Isaías Rodríguez, el Defensor del Pueblo, Germán Mundaraín, y el contralor general, Clodosvaldo Russián, por considerarlos "afectos" a Chávez. Un minuto de silencio por los caídos en la masacre del 11 de abril también selló la protesta, que, como ya se ha hecho costumbre, estuvo acompañada de la arenga "ni un paso atrás". Nello change the world before the world changes you because another world is possible www.peacelink.it/tematiche/latina/latina.htm